14 junio 2013

Detroit, primera gran ciudad que se declara en QUIEBRA




La ciudad de Detroit suspenderá los pagos de la deuda no garantizada, comenzando con una cuota de 39,7 millones de dólares que vencen hoy, según ha señalado el interventor Kevyn Orr, mientras se elabora un plan para evitar la bancarrota total.

Según informa Bloomberg, la ciudad podría crear un agencia regional del agua y los jubilados verían reducidas sus pensiones bajo el acuerdo que Orr ha presentado ante más de 100 acreedores y representantes de los trabajores.

A principios de marzo el gobernador de Michigan, Rick Snyder, declaró la emergencia financiera en la ciudad de Detroit, y más tarde designó un gestor de emergencia para las finanzas de la ciudad.

Con esta decisión, el gobernador quitó el poder al alcalde y la corporación municipal de una ciudad icónica, que en 1940 era la cuarta en tamaño de EEUU y que actualmente lucha por sobrevivir tras el desplome de la una vez pujante industria automovilística. "Es un día triste, un día que quisiera que nunca hubiera sucedido", explicó Snyder entonces. 

La historia reciente de la ciudad de Detroit, es bastante singular, en los últimos años ha pasado de ser una ciudad próspera, referente mundial de la industria del automóvil a perder el 63% de su población. 

Sin embargo, a pesar de la pérdida poblacional,  su extensión sigue siendo la misma, lo que ha dado lugar a barrios semiabandonados, donde la naturaleza se abre paso allí donde los trabajos de mantenimiento no llegan. El proceso menguante en el que está sumida la ciudad, se ha hecho de forma muy desordenada, y errática, ya que estamos acostumbrados a planificar el crecimiento de una ciudad o en todo caso sabemos gestionar el estancamiento de la misma, pero poco hay escrito sobre como llevar a cabo el desmantelamiento de una gran metrópoli.

Gestionar la despoblación en una ciudad presenta muchos desafíos porque muchos barrios de la ciudad se convierten en barrios fantasma. Son barrios con unos costes fijos que el ayuntamiento tiene que asumir, como mantenimiento, seguridad, limpieza, etc, pero de los que no se puede recaudar nada. De esta forma se entra en una espiral de destrucción que ha terminado en el "default" de Detroit. Con los raquíticos ingresos que ha podido conseguir el ayuntamiento no ha podido dar el servicio municipal que los ciudadanos merecen, lo que hace que los barrios se depriman aún más, provocando un éxodo mayor, y por tanto descendiendo la recaudación de impuestos, conllevando una disminución en los servicios que la ciudad puede ofrecer.
El panorama urbano de Detroit está formado por calles en las que se dan muchos edificios vacíos a continuación de otros ocupados o semiocupados. Si a esto le sumamos el alto desempleo de la ciudad, tenemos un caldo de cultimo perfecto para la aparición de todo tipo de delincuentes, que campan a sus anchas, ya que la ciudad está llena de pisos donde esconderse y la policía no puede controlar todos los barrios debido al gran área que ocupa la urbe. Todas estas circunstancias, han catapultado a la ciudad hasta el 2º puesto de las ciudades más violentas de EEUU, con 21,4 crímenes por cada 1.000 habitantes.

¿ A alguien se le ocurren ideas de cómo desmantelar una ciudad?.

2 comentarios:

  1. gran redacción, buen artículo

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  2. impresionante lo que ha ocurrido con esta ciudad... Existe un documental en el Canal Historia que ahonda en el tema. Muy interesante.

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